Para cualquier emprendimiento que busque generar un impacto relevante en el mercado es fundamental atraer talentos para potenciar el funcionamiento de la empresa y aumentar las posibilidades de éxito del negocio. Esta entrada del blog de Founder Institute puede ayudarte a lograrlo con algunos consejos para diseñar una descripción de cargo efectiva.
Ahora, después de capturar el talento es necesario conservarlo, y en este sentido las Stock Options o Opciones de Compra de Acciones pueden ser una herramienta crucial.
Este instrumento busca dar a los trabajadores de la empresa la posibilidad de adquirir participación en el negocio, en un momento acordado y a un precio preferencial (este precio deberá ser menos que el valor de mercado de la acción, ya que de lo contrario el beneficiario no tendrá interés en ejercer su opción). Esta posibilidad de hacerse dueño de una porción de la empresa, y por consiguiente de los beneficios futuros que se generen, busca crear una motivación y un compromiso adicional en el trabajador, al alinear sus intereses con los de la compañía y hacerlo parte del proyecto.
Es posible definir la Opción de Compra de Acciones como un “Contrato que materializa un sistema de compensación laboral, y mediante el cual se otorga al trabajador la facultad de ejercer la opción de comprar, en un plazo predeterminado y a un precio preferente y también predeterminado, acciones de la sociedad, con la cual se relaciona directa o indirectamente a través de su contrato de trabajo.” (Schmitz Vaccaro, Las Stock Options y su introducción en Chile, en Revista Chilena de Derecho, Vol. 29 N°3, pág. 558, Sección Estudios.)
En Chile está materia comenzó a ser regulada a partir del año 2000 (por la Norma de Carácter General nº 99 de la Superintendencia de Valores y Seguros), solo respecto de las Sociedades Anónimas. Luego se incluirían modificaciones a la ley respectiva (Ley 18.046), donde se establecen una serie de requisitos que deben cumplirse a la hora de realizar la operación de opción de compra de acciones ofrecidas a los trabajadores. De todas formas hoy no existiría impedimento para que las Sociedades por Acciones acuerden planes similares de beneficios para sus trabajadores mientras sus estatutos lo autoricen expresamente.
Los trabajadores beneficiados con el plan de beneficios pueden estar directamente contratados por la empresa emisora de las acciones o por una de sus filiales.
La implementación de un plan de beneficios podrá llevarse a cabo en tres momentos:
Emisión de acciones pendientes de suscripción al crear la empresa: Es común dejar una porción de acciones pendientes de suscripción al momento de crear la Sociedad por Acciones para ser adquiridas por los empleados clave que sean contratados en el corto plazo. Esta porción por lo general es de hasta un 10% sobre el total de la empresa.
Aumento de capital mediante emisión de acciones: También existe la posibilidad de materializar el plan de beneficios al momento de hacer un aumento de capital de la empresa mediante la emisión de nuevas acciones de pago. Algunos inversionistas pedirán expresamente que esto se realice como condición para invertir en la sociedad. Es necesario tener en cuenta que en caso de Sociedades Anónimas habrá que dar estricto cumplimiento a lo establecido en el articulo 24 de la Ley 18.046, que establece un porcentaje máximo de 10% para el efecto (aunque puede ser mayor si los accionistas renuncian a su opción preferente), plazos máximos para ejercer la opción y otras condiciones.
Recompra de acciones de propia emisión: Por último, la Sociedad puede realizar una compra de acciones de su propia emisión (solo acciones con presencia bursátil en el caso de Sociedades Anónimas Abiertas) con el objeto de ofrecerlas a sus trabajadores. Nuevamente en el caso de Sociedades Anónimas hay que dar cumplimiento a lo establecido en los artículo 27 a 27C de la Ley 18.046.
Es atingente analizar brevemente las implicancias del otorgamiento de stock options a los trabajadores desde el punto de vista del derecho laboral y tributario. En este sentido, mientras no se ejerza la opción por parte del trabajador, no habrá efectos para la legislación laboral, ni se producirán rentas para el trabajador. Luego, solo una vez ejercida la opción, la parte correspondiente al mayor valor obtenido entre lo pagado al ejercer la opción y el valor de mercado de la acción, deberá considerarse remuneración para los efectos de cálculo de imposiciones y otras prestaciones laborales, así como para efectos del pago del impuesto correspondiente del artículo 42 y siguientes de la Ley de la Renta.
Como vemos son bastantes las implicancias legales aparejadas al hecho de establecer un plan de beneficios para los trabajadores mediante stock options, pero en muchos casos será la manera más efectiva de generar los incentivos correctos para capturar y mantener el apreciado talento.
Santiago Henriquez C., Abogado
Foto: Alexandre Perotto (CC0)